Para cultivar semillas de marihuana y cannabis debemos tener en cuenta varios factores: la iluminación, el sustrato, los nutrientes, la humedad y la temperatura. Es importante elegir una buena semilla y preparar un espacio adecuado para el cultivo.
Las plantas de marihuana necesitan un ciclo de luz y oscuridad adecuado para crecer y florecer. La fase de vegetación necesita al menos 18 horas de luz diaria, mientras que la fase de floración necesita 12 horas de luz y 12 horas de oscuridad.
El sustrato para el cultivo de semillas de marihuana y cannabis puede ser tierra, coco, perlita o cualquier combinación de estos. Es importante elegir un sustrato de buena calidad para que las raíces puedan crecer bien y obtener los nutrientes necesarios.
Las plantas de marihuana necesitan nutrientes como nitrógeno, fósforo y potasio para crecer fuertes y sanas. Podemos utilizar abonos orgánicos o químicos para proporcionar los nutrientes necesarios.
La humedad y temperatura son factores importantes en el cultivo de semillas de marihuana y cannabis. La humedad debe estar en torno al 70% durante la fase de vegetación y alrededor del 50% durante la fase de floración. La temperatura debe estar en torno a los 25°C durante la fase de vegetación y alrededor de los 20°C durante la fase de floración.
El cannabis puede tener diferentes efectos según la variedad y la dosis. En general, se pueden distinguir dos tipos de efectos:
Los efectos psicoactivos del cannabis son los más conocidos y se deben a la presencia del THC (tetrahidrocannabinol) en la planta. Estos efectos incluyen sensación de euforia, relajación, alteración de la percepción del tiempo y del espacio, aumento del apetito y sequedad de boca.
Además de sus efectos psicoactivos, el cannabis también puede tener efectos terapéuticos. El CBD (cannabidiol) es uno de los compuestos más importantes en este sentido. Se ha demostrado que el CBD tiene propiedades antiinflamatorias, analgésicas, ansiolíticas y antipsicóticas.
La floración es la fase en la que las plantas de marihuana y cannabis desarrollan sus cogollos o flores.
La fase de floración comienza cuando la planta recibe 12 horas de oscuridad y 12 horas de luz. Durante esta fase, las plantas desarrollan sus cogollos y los tricomas, los pequeños cristales que recubren la flor y que contienen los compuestos psicoactivos y terapéuticos de la planta.
Las semillas de marihuana y cannabis pueden presentar diferentes características según la variedad. Algunas pueden ser más indicas o más sativas, más productivas, más resistentes a las plagas, etc. También pueden presentar diferentes sabores y aromas, desde florales y afrutados hasta terrosos y picantes.
El mono de los porros puede durar entre tres y siete días. Los síntomas incluyen ansiedad, irritabilidad, insomnio, falta de apetito y sudores nocturnos.
Una buena semilla de marihuana debe ser dura y oscura. También debe tener una capa gruesa y resistente que proteja el embrión de la humedad y las enfermedades.
Sí, las semillas de marihuana se pueden cultivar en exterior siempre y cuando se elija la época y las condiciones adecuadas. Es recomendable cultivar en primavera y verano y proteger las plantas de las lluvias y las bajas temperaturas.
Es importante consultar con un médico antes de consumir cannabis si se está tomando cualquier tipo de medicamento. Algunas sustancias pueden interactuar con los componentes de la planta y producir efectos no deseados.
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